Trazabilidad y logística para un mercado regulado de envases en Argentina

Debido al cambio en la regulación enfocada en la gestión de residuos, las empresas de productos de consumo en Argentina tendrán que modificar cómo gestionan sus envases posconsumo, y la tecnología viene al rescate

En Argentina, se espera un marco regulatorio integral para la implementación de la Responsabilidad Extendida del Productor (REP) en la gestión de residuos. Esta reforma revolucionará el sistema actual, transfiriendo a los productores la responsabilidad económica y de gestión de sus envases.

Se trata, en efecto, de un cambio profundo que beneficiará al ciudadano disminuyendo sus impuestos por gestión de residuos. Hasta ahora, los costos relacionados con esa gestión, que incluyen envases, han sido cubiertos principalmente a través de la tasa de ABL (Alumbrado, Barrido y Limpieza), pagada por los contribuyentes al estado argentino. Sin embargo, con la nueva reforma se transfieren las responsabilidades financieras de los municipios a los productores. El costo asociado específicamente al reciclaje y disposición final de envases recaerá sobre los productores, lo que marcará un cambio drástico en la forma en que se gestionan los residuos en el país.

En el escenario de la recuperación de envases posconsumo en el país, la startup argentina Reaquila se posiciona como un actor clave. Tiene más de cuatro años de experiencia en mercados internacionales, y ya opera exitosamente en España, un país con estrictas regulaciones en el sector de envases. Con clientes como Coca-Cola, CCU, TetraPak, Chango Más, Alvear Supermercados, Grupo Sancor Seguros, entre otros, la climatech ha rastreado y ayudado a recuperar más de 30 mil toneladas de envases posconsumo por año.

De izq. a der.: Max Fuchs y Facundo Roque de Intrevado, con Martín Parra y Max Rodríguez de Reaquila.

“El mercado argentino se está moviendo hacia un modelo liberal que simplificará el sistema.  Como ya estamos operando en entornos voluntarios como LATAM, y regulados como Europa, entendemos perfectamente cómo funcionará el mercado en Argentina”, explica Martín Parra, CEO de Reaquila.

Uno de los mayores desafíos de la transición hacia una reforma del sistema de gestión integral de residuos es garantizar que los productores puedan monitorear, trazar y auditar de manera efectiva la recuperación de sus envases. Reaquila se destaca en este aspecto, ofreciendo una plataforma tecnológica integral que proporciona trazabilidad desde el punto de consumo, hasta la disposición final de los envases. Este sistema permite verificar cada etapa del proceso, asegurando que no se produzca el fenómeno de double counting, un problema común en el sector del reciclaje en el cual dos empresas podrían contabilizar la misma cantidad de envases recuperados, duplicando las cifras reales de recupero.

«Nuestro sistema puede rastrear un envase posconsumo en toda su cadena de valor, desde que se dispone por el consumidor, hasta que es transformado en un nuevo material, lo que asegura una trazabilidad completa«, expresan desde Reaquila, y agregan: «Esto es crucial para que las grandes marcas y productores midan con precisión el cumplimiento de sus objetivos de recuperación. Además, nuestro sistema garantiza que no haya duplicidad en los datos, un problema importante a nivel global».

Además, Reaquila ha desarrollado soluciones logísticas que facilitan la recolección de residuos en hogares y puntos estratégicos en las ciudades. «Contamos con una plataforma de uberización, que permite a los usuarios solicitar la recolección de sus envases de manera similar a cómo funcionan servicios de entrega como Glovo o PedidosYa», comentan desde la startup que, además, ha diseñado dispositivos que se instalan en contenedores públicos, donde los usuarios pueden escanear un código y recibir puntos por depositar sus residuos correctamente.

Para digitalizar el final de la cadena de valor de envases posconsumo, Reaquila ha creado un marketplace de materiales reciclados, donde las industrias pueden comprar los materiales recuperados en las plantas de separación. Este modelo no solo promueve la circularidad, sino que también asegura a los productores el abastecimiento de sus líneas de producción, validando la recuperación. «Gracias a nuestra tecnología, podemos conectar los datos de punta a punta en tiempo real, ofreciendo una visión completa del proceso y asegurando que cada envase recuperado cuente», destacan desde Reaquila.

La experiencia en mercados voluntarios y regulados le ha permitido a la firma entender los desafíos y oportunidades que necesita Argentina. “Ahora, estamos listos para aplicar ese conocimiento y ayudar a las empresas a hacer una transición exitosa hacia este nuevo modelo”, concluyen desde la startup.