Cómo equilibrar la exploración con el uso responsable de los recursos
A medida que las ambiciones de la humanidad se extienden más allá de los límites de la Tierra, la necesidad de mantener el espacio sostenible se hace cada vez más evidente.
A principios del siglo XXI, sólo 14 naciones contaban con operadores de satélites autorizados. Desde entonces, han llegado a órbita satélites de 91 países y el número de empresas con actividades relacionadas con el espacio sigue creciendo.
Además, la exploración y utilización del espacio ultraterrestre ya no es dominio exclusivo de las agencias espaciales nacionales. Las empresas privadas, las empresas espaciales internacionales e incluso el turismo espacial están en auge, lo que hace que la gestión responsable sea más urgente que nunca.
En medio de la asombrosa expansión de la industria, la sostenibilidad espacial a largo plazo se ha convertido en una consideración clave para las agencias nacionales e internacionales, los operadores emergentes de pequeños satélites, las empresas espaciales establecidas del sector público y privado, y prácticamente todos los demás interesados en el espacio.
La Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), en su calidad de custodio regulador del espectro radioeléctrico mundial, desempeña un papel importante en la sostenibilidad del espacio. La gestión del uso del espectro por parte de los satélites, tanto geoestacionarios (OSG) como no geoestacionarios (no OSG), sigue siendo una de las contribuciones más importantes de la organización.
Las tecnologías espaciales proporcionan conectividad y respaldan servicios de comunicación vitales para la agricultura, la banca, el transporte y otros sectores a nivel mundial. Por lo tanto, los servicios espaciales son fundamentales para las interacciones económicas y sociales digitales modernas.
Es fundamental que salven vidas humanas durante emergencias y además ofrezcan información ambiental y climática a largo plazo.
Como organismo regulador internacional clave para las comunicaciones por satélite, la UIT asigna frecuencias de radio a diferentes servicios espaciales y desarrolla normas globales que ayudan a garantizar la sostenibilidad espacial a largo plazo.
Gestión del espectro radioeléctrico
Los satélites dependen de bandas de frecuencia específicas para comunicarse con sus estaciones terrestres asociadas o con otros satélites, y estas bandas son un recurso limitado. La UIT gestiona la asignación de frecuencias a todos los sistemas de satélites autorizados, evitando interferencias perjudiciales hacia, desde y entre satélites y garantizando un uso eficiente del espectro en beneficio de todos los países del mundo.
A través del Sector de Radiocomunicaciones de la UIT (UIT-R), los Estados miembros acuerdan cómo compartir el espectro radioeléctrico entre los distintos servicios de radio terrestres y espaciales. Esta coordinación es esencial para evitar interferencias en las señales que, de otro modo, degradan los servicios de comunicación.
Uno de los problemas más urgentes en materia de sostenibilidad espacial es la gestión de los desechos orbitales, es decir, cualquier objeto creado por el hombre en órbita alrededor de la Tierra que ya no cumple ninguna función útil.
Estos van desde objetos más pequeños que 1 milímetro de diámetro (como pequeñas motas de pintura liberadas por estrés térmico o pequeños impactos de partículas) hasta otros de 10 centímetros o mucho más (como satélites fuera de servicio o cohetes propulsores gastados).
La acumulación constante de desechos orbitales amenaza la viabilidad operativa de futuras misiones satelitales.
Garantizar la sostenibilidad del espectro
La gestión de los desechos orbitales queda fuera del mandato de la UIT, pero sí contribuye a promover el cumplimiento de las directrices acordadas por la Oficina de las Naciones Unidas para Asuntos del Espacio Ultraterrestre (UNOOSA) para la sostenibilidad a largo plazo de las actividades en el espacio ultraterrestre.
La reciente Asamblea de Radiocomunicaciones de la UIT ( AR-23 ), celebrada en Dubai (EAU), produjo la Resolución UIT-R 74, centrada en el uso sostenible del espectro de radiofrecuencias y los recursos de órbita satelital asociados por los servicios espaciales.
La resolución destacó el aumento de las solicitudes de satélites para sistemas no geoestacionarios, así como la creciente frecuencia de lanzamientos de satélites.
Seguimiento de la desorbitación y la eliminación
En una comunicación reciente relativa a la Resolución UIT-R 74 se describe el proceso para informar a la UIT sobre las estrategias de desorbitación y eliminación de vehículos espaciales. Esta recopilación de datos tiene por objeto informar a los actores espaciales sobre los métodos para prevenir la acumulación de desechos en el espacio ultraterrestre.
El sitio web dedicado a la ‘Puerta de la Sostenibilidad Espacial’ presentará la información recopilada, actualizada continuamente por la Oficina de Radiocomunicaciones de la UIT.
La claridad sobre la desorbitación y la eliminación ayudará a prevenir el crecimiento de desechos orbitales y garantizará la sostenibilidad a largo plazo de las órbitas de los satélites alrededor de la Tierra que sirven para innumerables propósitos de comunicaciones.
La labor de la UIT en materia de uso sostenible de las radiofrecuencias en el espacio respalda la Agenda Espacio2030 de las Naciones Unidas. Además de mejorar el acceso al espacio para todos, la Agenda Espacio2030 tiene por objeto aumentar la concienciación sobre la ciencia y la tecnología espaciales para contribuir a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
Registro y resolución de interferencias de radio
El rápido crecimiento y expansión de la conectividad satelital también implica mayores riesgos de interferencias de radio. La vigilancia continua y la coordinación internacional son fundamentales para garantizar la máxima fiabilidad de los servicios espaciales y las comunicaciones por satélite.
El Sistema de Notificación y Resolución de Interferencias Satelitales (SIRRS) de la UIT permite a los gobiernos y otras partes interesadas en el ámbito espacial (como operadores de satélites, agencias espaciales y otras entidades participantes) informar, a través de sus respectivas administraciones nacionales, sobre cualquier interferencia perjudicial que afecte a los servicios espaciales.
Los registros SIRRS contienen informes de incidencias de interferencia a lo largo de años sucesivos, lo que hace que los casos actuales y nuevos sean más fáciles de rastrear, analizar y resolver.
La vigilancia constante es esencial para identificar y mitigar las interferencias radioeléctricas perjudiciales para los sistemas espaciales. Para mantener la vigilancia necesaria, varias estaciones terrestres observan cómo los sistemas satelitales en diferentes órbitas utilizan el espectro radioeléctrico.
Los casos no resueltos de interferencia perjudicial se remiten finalmente a la Junta del Reglamento de Radiocomunicaciones , el órgano clave de la UIT facultado para actuar entre las Conferencias Mundiales de Radiocomunicaciones para apoyar la aplicación práctica y efectiva del Reglamento de Radiocomunicaciones.
Mediante la colaboración y el intercambio de información entre las partes interesadas en el espacio, la UIT busca promover una cultura colectiva de gestión del espectro y del espacio.
Una mentalidad global de responsabilidad espacial es esencial para garantizar el uso sostenible del espectro de radiofrecuencia tanto en el espacio como en la Tierra.
Anticipándose a los desafíos
Mantener la sostenibilidad del espacio implica no sólo gestionar las actividades espaciales actuales, sino también anticipar nuevos avances y desafíos.
Los organismos de las Naciones Unidas y las partes interesadas en el ámbito espacial de todo el mundo se esfuerzan por garantizar que el espacio ultraterrestre siga siendo un entorno seguro y sostenible para las generaciones futuras.
A través de ONU-Espacio, un mecanismo de coordinación interinstitucional sobre actividades en el espacio ultraterrestre, la UIT mantiene un vínculo activo con la Oficina de Observación y Observación de las Naciones Unidas en Materia de Espacio Ultraterrestre (UNOOSA) y otras organizaciones de las Naciones Unidas sobre actividades actuales y futuras, tecnologías emergentes de interés y otros asuntos relacionados.
Con el creciente uso del espacio viene una gran responsabilidad.
El futuro del espacio depende de la capacidad de la humanidad para equilibrar la exploración y el avance tecnológico con la preservación del entorno espacial, garantizando que el espacio siga siendo accesible para las generaciones futuras.
Foro de Sostenibilidad Espacial 2024
El primer Foro sobre Sostenibilidad Espacial