Tecnologías innovadoras para reducir emisiones de Vaca Muerta
Fuente Diario de la AOG: En la zona del río Mississippi, en Estados Unidos, navegan barcazas que transportan petróleo no convencional. Durante la carga de estas embarcaciones se generan vapores para reducir riesgos y emisiones y aprovechar al máximo los recursos, la industria petrolera estadounidense instaló equipos de captación para recuperar el vapor que se genera en los tanques de esas barcazas.
Estados Unidos tiene instalados estos equipos masivamente en las formaciones de shale. El resultado de esta inversión significó una mejora ambiental y económica porque se aprovechan los recursos al máximo. En la Argentina recién se está desarrollando, sobre todo con la llegada al mercado de los equipos conocidos como Unidades Recuperadoras de Vapor (URV), un sistema de compresión destinado a captar los vapores de hidrocarburos generados en los tanques de almacenamiento de crudo. La empresa que hace punta en el país en este producto es Aercom, una firma con base en Rosario, pero que desde hace dos años abrió oficinas en Neuquén (también en el AMBA) ya que es la única que trabaja con foco en este producto y realiza el diseño y mantenimiento posterior.
El Diario de la AOG entrevistó a Sebastián Martinovic, director Comercial y Operativo, y a Gonzalo Fernández, director de Compresión y Tratamiento de Gas, de Aercom. Ambos explicaron que el foco de la empresa está puesto en el cuidado ambiental y la reducción de emisiones de CO2, pero a través de equipos que generan un mejor aprovechamiento económico de los recursos. El shale oil de Vaca Muerta tiene una importante mezcla de petróleo y gas asociado, que luego se separa (separadores primarios y secundarios). La característica es que se obtiene mucho gas diluido en el petróleo y a muy baja presión.
«La única forma de recuperar este vapor es a través de las URV, el vapor es lo que está en el medio de los estados líquidos y gaseosos por lo que el cambio de fases es muy inestable. Es un proceso de captación de esos vapores», explicó Gonzalo Fernández. Además de las URV, Aercom también desarrolla para el sector equipos para instalar en boca de pozo y de tratamiento de gas combustible entre otras aplicaciones que también maximizan el aprovechamiento de los hidrocarburos y reducen las emisiones. «Nos estamos preparando para un gran crecimiento en Vaca Muerta», afirmó Sebastián Martinovic. Y añadió que «las petroleras están aplicando programas muy fuertes en temas ambientales». Aercom tiene más de 20 años como proveedora de la industria.
Es una empresa de servicios de energía eléctrica y soluciones con foco en la agenda de sustentabilidad. Pero el desarrollo de Vaca Muerta le cambió la ecuación, la industria hidrocarburífera le abrió la puerta a diseñar, fabricar y hacer el trabajo de mantenimiento posterior de estos equipos. El desafío que tiene está vinculado con la diversidad de geografías y climas donde está ubicado el sector petrolero del país. «En la zona de Comodoro Rivadavia el clima es frío, pero uniforme.
En cambio, en la zona de Neuquén la dificultad es que entre el verano e invierno la variación del clima es muy importante (puede pasar de más de 40° a temperaturas bajo cero). Nuestro trabajo es sobre el tratamiento del vapor con un clima que tiene un de los hidrocarburos y reducen las emisiones. «Nos estamos preparando para un gran crecimiento en Vaca Muerta», afirmó Sebastián Martinovic.
Y añadió que «las petroleras están aplicando programas muy fuertes en temas ambientales». Aercom tiene más de 20 años como proveedora de la industria. Es una empresa de servicios de energía eléctrica y soluciones con foco en la agenda de sustentabilidad. Pero el desarrollo de Vaca Muerta le cambió la ecuación, la industria hidrocarburífera le abrió la puerta a diseñar, fabricar y hacer el trabajo de mantenimiento posterior de estos equipos. El desafío que tiene está vinculado con la diversidad de geografías y climas donde está ubicado el sector petrolero del país.
«En la zona de Comodoro Rivadavia el clima es frío, pero uniforme. En cambio, en la zona de Neuquén la dificultad es que entre el verano e invierno la variación del clima es muy importante (puede pasar de más de 40° a temperaturas bajo cero). Nuestro trabajo es sobre el tratamiento del vapor con un clima que tiene un impacto muy distinto en los equipos entre el verano y el invierno», explicó Gonzalo Fernández.
¿Cuál es el escenario actual de la industria petrolera en vinculación con los equipos que desarrollan ustedes?
Martinovic: Venimos trabajando fuerte con la industria petrolera. Se está haciendo mucho hincapié en reducir emanaciones. La provincia de Neuquén está realizando un control cada vez más fuerte, que incluso puede llegar a suspensiones con afectación de la producción. Todas las petroleras tienen cada vez más trabajo y están subidas a este tren para reducir emisiones y pérdidas. Las petroleras tienen programas muy fuertes en temas ambientales. Hay una tendencia muy marcada a concretar inversiones y desarrollar equipos de trabajo para implementar estos sistemas.
¿Qué importancia tienen para la industria estos equipos?
Fernández: Nosotros tenemos distintas aplicaciones. Una de las principales en reducción de emisiones son los compresores en boca de pozo, que son equipos que bajan la presión del gas asociado que se genera en un pozo de petróleo cuando produce. Otra aplicación son las Unidades Recuperadoras de Vapor (URV).
Esto tiene que ver con el tratamiento de los vapores que se generan en los tanques de almacenamiento de crudo. En verano, por las altas temperaturas, se venteaba más que en invierno por la evaporación. Con la llegada de la producción no convencional, sobre todo shale oil, de donde se saca una mezcla de gas y crudo, que luego se separa (separadores primarios y secundarios), se termina teniendo mucho gas diluido en el petróleo a muy baja presión. La única forma de recuperar ese vapor es a través de las URV, que trabaja sobre lo que está en el medio entre los estados líquidos y gaseosos. Es un proceso de captación de esos vapores.
Antes las URV convencionales tenían 30 o 40 caballos de fuerza, que se utilizaban para mejorar las condiciones ambientales de las baterías. Hoy las URV en Vaca Muerta tienen 600 caballos de fuerza. El cambio es muy importante.
¿Cómo se adaptan las URV a las distintas temperaturas donde está ubicada la industria petrolera en el país?
Fernández: En Vaca Muerta se produce un condensado muy puro y en grandes cantidades. Las petroleras evalúan el rendimiento de los equipos y los líquidos que generan las URV. Esto está atravesado, además, por el tratamiento ambiental de la actividad.
¿Cuál es el escenario actual de la industria petrolera en vinculación con los equipos que desarrollan ustedes?
Martinovic: Venimos trabajando fuer- te con la industria petrolera. Se está haciendo mucho hincapié en redu- cir emanaciones. La provincia de Neuquén está realizando un con- trol cada vez más fuerte, que inclu- so puede llegar a suspensiones con afectación de la producción. Todas las petroleras tienen cada vez más trabajo y están subidas a este tren para reducir emisiones y pérdidas. Las petroleras tienen programas muy fuertes en temas ambientales. Hay una tendencia muy marcada a concretar inversiones y desarrollar equipos de trabajo para implemen- tar estos sistemas.
¿Qué importancia tienen para la industria estos equipos?
Fernández: Nosotros tenemos distin- tas aplicaciones. Una de las princi- pales en reducción de emisiones son los compresores en boca de pozo, que son equipos que bajan la pre- sión del gas asociado que se genera en un pozo de petróleo cuando pro- duce. Otra aplicación son las Unida- des Recuperadoras de Vapor (URV). Esto tiene que ver con el tratamiento de los vapores que se generan en los tanques de almacenamiento de cru- do. En verano, por las altas tempera- turas, se venteaba más que en invier- no por la evaporación. Con la llegada de la producción no convencional, sobre todo shale oil, de donde se saca una mezcla de gas y crudo, que lue- go se separa (separadores primarios y secundarios), se termina teniendo mucho gas diluido en el petróleo a muy baja presión. La única forma de recuperar ese vapor es a través de las URV, que trabaja sobre lo que está en el medio entre los estados líquidos y gaseosos. Es un proceso de capta- ción de esos vapores. Antes las URV convencionales tenían 30 o 40 caba- llos de fuerza, que se utilizaban para mejorar las condiciones ambienta- les de las baterías. Hoy las URV en Vaca Muerta tienen 600 caballos de fuerza. El cambio es muy importante.
¿Cómo se adaptan las URV a las distintas temperaturas donde está ubicada la industria petrolera en el país?
Fernández: En Vaca Muerta se produ- ce un condensado muy puro y en grandes cantidades. Las petroleras evalúan el rendimiento de los equi- pos y los líquidos que generan las URV. Esto está atravesado, además, por el tratamiento ambiental de la actividad.
Martinovic: Estos equipos son muy diferentes a los que está acostum- brada la industria petrolera de lo que es un compresor de gas o una bomba. Vemos que algunas compañías adquirieron equipos genéricos afuera y hoy están teniendo proble- mas con estas unidades importadas. Estamos haciendo un fuerte trabajo sobre este tema. Se requiere un tra- tamiento distinto al convencional por el área geográfica donde están las instalaciones. Este tema es muy importante en la industria porque es nuevo. Si bien hay mucha experien- cia en Estados Unidos, recién ahora se está empezando a traer a la Argen- tina. Es relevante para Vaca Muerta porque las áreas están produciendo a tope y estos vapores en las plantas generan riesgos de atmósfera explo- siva y la industria tiene que trabajar sobre esto.
¿Por qué cambia el diseño por el tipo de clima?
Fernández: Es determinante. Lo que hacemos en los proyectos es trabajar con el gas y saber hasta qué presión podemos descargar. Esto nos va a de- cir qué tipo de compresor podemos usar, como por ejemplo los soplado- res, paletas o compresores tornillo. También qué tipo de aceites, cuán- do van los filtros, enfriadores a veces se instalan y otras veces se hace by- pass, otras pueden condensar todo. Es decir, cada lugar donde se insta- la un equipo tiene un cuidado espe- cial en el diseño para que el proyecto funcione
Martinovic: Esta es una apli- cación distinta a la mayoría de los equipos de procesos que integran una planta, donde hay un estándar. Acá nosotros trabajamos con cada proyecto a medida para cada insta- lación por la propia diversidad de áreas que hay. No necesariamen- te un equipo diseñado para un área funciona en otra. Hay que estar ajus- tando la ingeniería de los equipos para adaptarla a los diseños.
¿En qué tipo de instalaciones tienen equipos desarrollados?
Martinovic: Las aplicaciones llegan a toda la industria, porque pueden instalarse en una refinería, en una planta de generación con turbi- nas o equipos con combustión in- terna, campos petroleros o en otras instalaciones.
Fernández: Tenemos instalados equipos en áreas petroleras y en plantas de biogás. Además, trabaja- mos con otra aplicación que son los sistemas de tratamiento de gas com- bustible, que no sólo puede estar en un pozo de producción sino en dis- tintas instalaciones. Tomamos el gas crudo, hacemos una primera y pequeña refinación donde lo limpia- mos y filtramos de componentes ga- seosos para que otros equipos como los quemadores no tengan proble- mas de temperaturas.
¿Cuál es el aporte en reducción de emisiones?
Fernández: Tenemos muchas aplica- ciones y depende del cliente instalar equipos para reducir las emisiones. En el caso de los vapores, instala- mos un equipo en la parte final de recolección de petróleo, previo a la entrada del crudo en el oleoducto, y la antorcha la apagamos. Lo único que queda es una antorcha de pilo- to. Esto quiere decir que podemos re- cuperar todo lo que la petrolera per- mita que se recupere. En cuanto a captación en boca de pozo pasa algo similar, a mayor cantidad de equipos instalados mayor es la eliminación del venteo del gas asociado en lo que es producción.
Martinovic: Estos equipos están en casi un ciento por ciento de eficien- cia en reducción de emisiones. En una planta hay varios focos de ven- teo o emisiones. Hoy estamos traba- jando sobre muchas instalaciones viejas en los campos y estamos ha- ciendo muchas adecuaciones para captar todos los gases que se están venteando.
¿Cómo es esta actividad en Estados Unidos, donde tienen más desarrollo en los no convencionales?
Fernández: En Estados Unidos hay muchos particulares en la industria, no es como en la Argentina que hay sólo grandes petroleras. Creo que por esto tienen muy difundida estas aplicaciones para reducir las emisio- nes porque, además, al final del día terminan recuperando hasta lo últi- mo de petróleo o de un combustible muy rico, que no quieren dejar esca- par. Ellos tienen muchos tanques, todos interconectados entre sí y ter- minan en una URV. Trabajan sobre la reducción de emisiones por una cuestión ambiental y por un tema económico, porque no se les escapa nada. En el shale de Estados Unidos, como en Eagle Ford, tuvieron los mis- mos problemas que en la Argentina, porque se encontraron con muchas cantidades de gas disuelto. Las em- presas en Estados Unidos termina- ron instalando estos sistemas de captación de vapor.
Martinovic: Estados Unidos tiene distintas regulaciones dependiendo de cada estado. Esto también genera distintos tratamientos y diseños de equipos. Las petroleras en ese país apuntan a la reducción de emisio- nes, así evitan penalidades de la re- gulación, pero también apuntan a no perder ni un metro cúbico de gas ni un volumen de petróleo. Reducen las emisiones, pero al mismo tiempo maximizan la producción.
¿Qué perspectiva de crecimiento tienen estas aplicaciones en la industria petrolera argentina?
Martinovic: El segmento de URV tie- ne una enorme perspectiva. Entendemos que, con la inauguración del Gasoducto Néstor Kirchner, con las ampliaciones que faltan y con la re- versión del Gasoducto Norte, Vaca Muerta debería crecer exponencialmente. Creemos que tenemos que acompañar este crecimiento con las URV y el resto de las aplicaciones que también van a tener mucha de- manda, estamos enfocados en esto