Finaliza el proyecto para la incorporación de bioplásticos
Finaliza el proyecto para la incorporación de bioplásticos en la cadena de fabricación de la empresa IP Triana. El Centro Tecnológico Eurecat, Industrias Plásticas Triana y el Packaging Cluster finalizan el proyecto BIO-ENV para ofrecer una nueva solución de envase circular
Un proyecto colaborativo que permitirá dar versatilidad al negocio de IP Triana con productos innovadores y más sostenibles.
El proyecto BIO-ENV nació en 2018, con el objetivo de estudiar la biodegradabilidad de un envase de polipropileno de IP Triana, contando con el conocimiento del Centro Tecnológico Eurecat, para identificar, validar y certificar que los materiales biodegradables seleccionados son compatibles con los productos y procesos de fabricación de IP Triana a partir de unas pruebas iniciales, e incorporar estos productos al catálogo de soluciones sostenibles, aportando un valor añadido al mercado.
IP Triana es una empresa familiar dedicada a la fabricación de envases de plástico por inyección en sectores farmacéutico y de gran consumo. Su visión es conseguir productos más sostenibles y que se adapten a las necesidades de mercado y normativas. El objetivo de la empresa es fabricar un 5% de las unidades vendidas del envase seleccionado (envase transparente de 218ml) en material biodegradable en 2021 y un 50% en 2025 y un 1% y 10% respectivamente por total producción de la empresa en la categoría de envases de gran consumo.
La colaboración del Centro Tecnológico Eurecat en el proyecto, permitió ir más allá de la verificación del cumplimiento de la biodegradación bajo condiciones de compostabilidad controlada según ISO 14855 y llevar a cabo análisis suplementarios. Eurecat identificó unos materiales bioplásticos compatibles con los productos de IP Triana que cumplieran con los requerimientos definidos en la propuesta del proyecto.
Finalmente, el material seleccionado como alternativa al polipropileno ha sido un termoplástico de origen biológico, apto para la producción de envases alimenticios según el criterio del Reglamento (UE) nº10 / 2011, siendo un material compostable y que ya dispone por sí mismo de certificado de compostaje industrial y es apto para alta y baja temperatura.
Con esta muestra, se espera que un 50% de la fabricación de los envases seleccionados de gran consumo de IP Triana para 2025 sean con material biodegradable, apostando por un modelo sostenible y escalable al resto de la industria del packaging.