Economía circular para seguir viviendo
Por Vicente Caruz, presidente de Eurochile
El tiempo se acaba. El margen de acción para hacer frente a los efectos del calentamiento global va desapareciendo y todos los países deben tomar medidas de manera urgente. Es preciso un cambio radical del actual modelo social, económico y energético, que con la lógica de extraer, producir y tirar genera la emisión de gases de efecto invernadero que provocan el actual cambio climático.
Debemos modificar la forma en la que nos movemos, generamos energía, producimos y consumimos bienes y servicios. Si bien el Pacto Climático de Glasgow mantuvo las metas del Acuerdo de París, evidenció lo catastrófica de la situación de nuestro planeta. En poco menos de tres siglos hemos empleado lo que la tierra acumuló en más de 30 millones y por eso las medidas deben tomarse ahora. Tal como se expuso en la COP26, esos cambios deben acelerarse con compromisos climáticos más ambiciosos, como el tomado por Chile respecto a comercializar sólo autos eléctricos a 2035.
Pero debemos ir más allá, abordarlo de manera sistémica para transitar hacia un modelo de desarrollo sustentable, donde la economía circular cumple un rol esencial, pues supone una reducción sustancial en el consumo de materiales y productos, junto con el aumento del reciclaje y la reutilización de éstos.
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La economía circular implica que todas las empresas rediseñen y adapten sus procesos productivos y de servicios con innovación, a través del uso de tecnología. Que los gobiernos dispongan de infraestructura pública verde y circular, y que las familias- todas y todos nosotros- modifiquen sus hábitos de consumo, acelerando al hoy la toma de acción.
En esta tarea es fundamental además que se impulse la implementación de la economía circular a aquellos sectores que pudieran quedar rezagados en este avance que necesitamos. El rol que cumplen las alianzas y las redes para el intercambio de experiencias y buenas prácticas son fundamentales para que las pequeñas y medianas empresas, por ejemplo, puedan ir migrando a una manera de producción o servicio circular.
Hablemos de economía circular, divulguemos de manera extensa la puerta que abre para un desarrollo que se sustente en el tiempo, que nos permita salir de la crisis- sanitaria y ambiental- con un sentido de adaptación sostenible, donde todos y todas tenemos un papel que cumplir.